En un partido muy bien jugado por ambos equipos tanteando cerca de los 100 puntos cada uno, Pacaembú se impuso a Remeros en la tercera final del Torneo Competencia Regional.
La diferencia final no refleja para nada en cuanto a la cantidad de puntos, la que hubo en cancha.
Remeros dominó todo el partido, si bien agrandó distancias solamente en un par de ocasiones en 10 tantos.
Es de hacer notar que el primer cuarto se jugó muy rápido, con pocas interrupciones y sin tiempos pedidos por ninguno de los 2 equipos.
Cuando termina el segundo cuarto, y regresan luego de la pausa al tercero, la cancha estaba cubierta de papel picado, que el muchacho encargado de limpiar demoró 10 minutos en barrer, y cuando había casi terminado un grupo de chiquilines ya había ensuciado de nuevo el otro sector de la cancha.
El tercer cuarto anunció algún fallo polémico pero Remeros seguía dominando con un Alemañy muy claro desde el triple y Pacaembú errando bastante, aunque nada extremo, solo por debajo del goleo habitual.
El último cuarto fue para el olvido en cuanto a los jueces. Otra vez groseras fallas arbitrales, donde se veía, hasta si usted quiere. una actitud cínica de un juez y la pasividad o aceptación del otro.
Hablar del tema sería abundar en algo que ya se dijo.
Se vió un fallo calculado y afectado del juez sanducero, y la pasividad e inoperancia del local sobre todo en el cuarto final.
Para ser más gráficos, en una falta cobrada, el juez sanducero se encuentra detrás del sancionado y entre medio de él y el susodicho, hay un jugador que por su corpulencia le impide ver la jugada. Quien ataca, quiere hacer el lanzamiento, y el defensor se planta sin mover piernas ni brazos y detrás un jugador atacante tapando la visión del juez y arrecostado al defensa. Ante el grito del atacante (que vé como su tiro falla) el juez compra la falta y es la quinta para el defensa, el segundo juez mira para otro lado.
Situaciones de este tipo y mucho peores pasaron a menudo y sobre todo en el último cuarto.
Un tema a mejorar sin dudas, para tener espectáculos de calidad.
La nota distinta fue que antes de comenzar, los jugadores de Remeros no posaron con todo su equipo ante el pedido de la prensa que ya había fotografiado a Pacaembú y solo accederieron a la foto los 5 que comenzaron jugando el partido.
Vaya a saber porque… pero a veces el que calla otorga… y en algún momento le llega la factura.
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